Una milonga de amor

Muy buenas noches, señores y disculpen
Si es que me meto no siendo un invitao,
No soy un vago ni tampoco un amargao,
Que pretende esta reunión,
Con mi presencia perturbar.

Pido permiso, pa´ estar por un momento
Tomar un trago, sentarle un corte a un tango,
Me gusta el baile, soy cantor y me arremango,
Y cuerpeándole a la vida
Voy cantando sin cesar.

Voy a cantarles, señores
La historia de mis dolores...

En la carpeta de mis ilusiones
Yo corto mi mazo de naipes marcaos,
Me juego entero en la pampa de amores
Por unos ojazos que me han embrujao.
Y voy tras esos ojos que son dos luceros
Y busco esos labios que aun no he besao,
Para envolverla con todo el cariño
Que dentro del alma, sincero ha de brotar.

Salí una noche a cantar por esas calles
Me hablaba El alma de algún secreto amor,
De pronto vi una silueta misteriosa,
Que pasando por mi lado
En su perfume me envolvió.

Seguí sus pasos, dobló por una esquina
Y entre las sombras su imagen se perdió,
Desde esa noche, con afán la voy buscando,
Pues la luz de sus ojazos
A mi espíritu alumbró.

Recitado:
Desde Belgrano a Puente Alsina
Busco a la china que me embrujó...
Voy cantando de noche y día
La fantasía de mi corazón.


Y así termina, señores
La historia de mis dolores...